De Cádiz a Paris... Por fin llegamos!


lara loon en chamartin

París, a dos horas en avión desde Sevilla, no está tan lejos. También suele ser económico si reservas tu billete con antelación y los aeropuertos en París están bien comunicados. ¿Quién no hubiese escogido esta opción? Nosotros.

Como siempre, no nos gusta hacer más de lo mismo así que tuvimos en cuenta otras opciones. Queríamos disfrutar del viaje en sí, por lo que el tren nos pareció muy buena idea, el problema es que este trenhotel internacional solo sale desde Madrid, así que el corto trayecto de dos horas se convirtió en dos días seguidos viajando. No nos arrepentimos de nuestra opción ya que lo hemos pasado muy bien y si hubiésemos ido en avión no tendríamos tantas cosas para contar en nuestro blog, solo hubiéramos podido contar cosas como, hubo muchas turbulencias, me entró pánico o me ha costado un pastón por la facturación y el peso del equipaje.

El 25 de agosto a las 23:00 pm cogíamos el autobús (Socibus) con destino Madrid que llegaría a las 07:30 am. Decir que aunque un poco pesado, el viaje no está tan mal ya que estos autobuses han sido renovados y han mejorado en espacio y comodidad. Una vez nos encontramos en la estación de autobuses teníamos que llegar hasta la estacion de Chamartín desde donde sale el tren Francisco de Goya (compañía Elipsos-Renfe) que nos llevaría a París. Como nuestra intención era pasar un viaje agradable en tren, decidimos viajar en Gran Clase, es decir, lo mejor de lo mejor. Reservando con más de 90 días de antelación el precio del billete para una cabina de dos personas es de 370 euros. Es una oferta especial llamada "pareja mini" y lo mejor es que incluye una cena gourmet a la carta y un desayuno 5 estrellas. Este tren sale a las 19.00 pm y llega a las 08.30. El problema es que estuvimos esperando en Chamartín desde las 8 de la mañana. Como podeis imaginar después de toda una noche de autobús donde apenas se descansa, un día entero esperando en una estación es algo que se hace muy pesado, pero bueno teníamos un privilegio... LA SALA CLUB.
sala club

La sala club es un privilegio reservado a los pasajeros que viajan en gran clase o preferente y aquí puedes esperar tu tren hasta dos horas antes de su partida. Esta sala cambió nuestro punto de vista. Al entrar no parecíamos estar en la incómoda estación donde una y otra vez el robot de megafonía anunciaba trenes que llegaban o partían, o donde te quedabas dormido en un asiento metálico y la espalda se te quedaba echa polvo, o los aseos... mejor no hablamos de ellos. La sala club era el paraíso. Cómodos sofás y sillones por todos sitios, una azafata que te indicaba cuando y donde ir para subir al tren, servicios más que limpios pero lo mejor de todo, buffet libre y gratis de café, té, zumos, refrescos e incluso alguna que otra bebida alcohólica así como frutos secos; wifi, zona para portátiles, prensa y revistas. En fin que de 5 a 7 se nos pasó volando y cuando nos dimos cuenta ya nos encontrábamos en nuestra cabina del tren. Lo que hace el tener dinero... Solo una puerta separa una espera agonizante de otra más que tranquila y confortable.
salaclub

cabina

La cabina del tren, MUY pequeña pero bien organizada. Cuenta con dos camas y un aseo personal que tiene hasta ducha. La cabina es muy cómoda y se duerme muy bien, aunque yo en mitad de la noche me desperté con claustrofobia pero vamos, yo soy muy exagerada.

Para mí lo mejor fue el restaurante; es uno de los mejores en los que he estado y además la comida era buenísima. Había dos cartas donde elegir y la cena llevaba incluídas las bebidas (vinos y licores) y el postre. Aquí va nuestro menú:

1º Platos:

- Surtido de ibéricos con tostas de salmorejo.

- Ensalada de pollo crujiente con parmesano y salsa César.

2º Platos:

-Entrecot de ternera con salsa de castañas asadas.

Postre:

- Crêpes rellenos de crema de castañas.
Restaurante

Esta cena, costaba más de 50 euros, y si dividimos los 370 euros entre dos cada uno paga 185 euros, yo creo que el precio de la oferta está más que pagado. Te sirven con mucha simpatía y no te falta de nada. La calidad de la comida es más buena incluso que en algunos restaurantes para tratarse de un tren.

Cabina de noche

A la mañana siguiente fuimos a desayunar y lo mismo, un desayuno estupendo y muy completo, con tostadas, bollería y fruta. Ya nos encontrábamos muy nerviosos por llegar a París y los últimos minutos se hicieron eternos hasta que el tren efectuó su última parada: Paris-Austerlitz... Por fin llegamos!


Comentarios

  1. Tia, te pregunté ayer que qué tal el viaje, pero vamos, ahora parece que he ido yo contigo!! jajaja
    que lujazo de tren! vaya si os lo habéis montado bien!!
    No puedo más que alegrarme y alegrarme de que todo haya ido tan bien. Y ahora, sólo espero que vaya cada vez mejor!! ¿Has ido ya a ver tu nueva unniversidad? Seguro que Filosofía y Letras no tiene nada que envidiarle!!! jajaja
    Muchos besitos sister!

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  2. que vaaa killaaa hasta el dia 9 no tengo que ir, y el dia 1 al piso. Pero vamos yo la vi en fotos y no veas tiene que ser la caña, un besitooooo

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